¿Cuánto vale un colchón? ¿Cuánto debo gastarme? Claves para ayudar a hacerte una idea

Es un clásico cuando vamos a una tienda de colchones: vemos productos de 500, de 800 euros… hasta de más de 2.000 euros. La horquilla ofrece diferencias sorprendentes. Quizá ya nos hayamos hecho a la idea de que nuestro descanso probablemente requerirá mayor inversión que los incluso 200 o 300 euros que podemos ver anunciados en tiendas online, en grandes cadenas y en grandes letras de oferta en escaparates de nuestro barrio. Pero… ¿cuál es exactamente esa inversión? ¿Realmente si invertimos 1.500 euros dormiremos el triple de bien que si gastamos 500? ¿Es imposible encontrar un buen colchón por menos de 500 euros? En este post intentaremos responder a estas preguntas ofreciendo algunas claves para ayudarte a decidir cuánto gastarte en un colchón y una guía sobre qué obtendremos por cada rango de precios.

¿De qué depende el precio de un colchón?

Aunque probablemente lo primero que relacionemos con el precio de un colchón es su calidad, así a rasgos generales, hay otros factores que hacen oscilar su precio. Podemos citar algunos factores que influyen especialmente en cuánto vale un colchón, como:

• Características: existen colchones de tipo tradicional, como los de muelles con capas de acolchado de espuma de poliuretano estándar, con un mismo nivel de firmeza en toda la superficie, y otros que pueden ser más complejos, con zonas diferenciadas de descanso, capas intermedias especiales, tratamientos de transpirabilidad, etc. Por ejemplo, si tenemos tendencia a los dolores de espalda o de cuello o de articulaciones, necesitaremos unas características de firmeza y adaptabilidad que se reflejarán en el precio final, así como si pesamos mucho (y más aún si son dos personas de mucho peso las que duermen en la misma cama), necesitaremos un colchón que soporte mejor el peso y la deformación del material.
• Tamaño: evidentemente, a mayor tamaño de un colchón, más materiales se requieren, mayor es su coste de embalaje, de transporte, de almacenaje en tienda, etc.
• Materiales: normalmente los colchones híbridos y los colchones de látex natural o de nanomuelles suelen ser más costosos que los modelos de muelles simples, de espumación estándar o de viscoelástica. Además, cuantas más capas y más densidad (y más grueso es el colchón), más materiales necesitará, y por lo tanto más se incrementará su coste. Además, lo que más se refleja en el precio de un colchón es el material presente en el núcleo y su cantidad, más que en los acolchados. Así, es diferente un colchón que tiene un núcleo de 18 cm de material, como el Heveá de MATINER Natural-Descans, que otro que tiene 3 cm.
• Lugar de fabricación: los colchones fabricados en España y otros países de nuestro entorno pueden ser más caros que los producidos en otros lugares donde, a pesar de que hay más trayecto en transporte (y por lo tanto, más impacto ambiental), la mano de obra es más barata.
• Tipo de tienda: comprar colchones online puede ser más económico porque no implica los costes asociados al mantenimiento de una tienda, sólo los de almacenaje, sin embargo no permite probar los colchones y al poder devolverse un colchón dentro de los 14 días siguientes de la compra por internet, hay que contar con que el precio incluya los costes medios asociados a esas devoluciones.
• Transporte y entrega: aunque hoy en día cada vez menos vendedores cobran un precio adicional por el transporte y entrega en casa del comprador (y la retirada del colchón antiguo, que requiere un procesamiento adicional como objeto voluminoso y de reciclado complejo que es) probablemente este precio venga reflejado en el precio base. Este es uno de los factores en los que las grandes empresas tienen ventajas competitivas porque pueden lograr mejores precios.
• Garantías y políticas de devolución: siempre es deseable comprar colchones con una garantía que mejore la obligatoria, y con una política de devolución lo más flexible posible, pero esto suele verse reflejado en el precio del colchón.

A todos estos condicionantes hay que añadir otros como la inversión del fabricante en investigación y desarrollo (pruebas de fábrica, pruebas de laboratorio, etc.), como la inversión en publicidad si la hace, etc.

¿Cuánto cuesta el colchón VS cuánto dura?

Hay una primera cuenta que tenemos que echar a la hora de invertir en un colchón que es cuánto queremos que nos dure. A partir de ahí, debemos dividir el precio entre los años (o los meses) de vida útil esperada de un colchón y ver a cuánto nos sale. La mayor parte de veces nos sorprenderemos de que una noche de descanso en un colchón de calidad para el que se requiere mayor presupuesto no nos costará mucho más cara que la noche en un colchón de calidad menor.

Imaginemos un colchón de látex 100% natural como el de MATINER Natural-Descans con 7 zonas de descanos y un núcleo 18 cm, que pudiera costar unos 1.400 euros para una cama de matrimonio. Si dividimos los 15 años que puede durar entre su coste, obtendremos que las dos personas que duermen en él, lo hacen por 0,10€ por noche cada una.

En cambio, si hacemos ese mismo cálculo con un colchón sintético de marca blanca de la misma medida comprado en unos grandes almacenes por 400 euros, que pueda durar unos 6 años, comprobaremos que sólo variará en 0,01€ por noche por persona más barato, y obviamente la experiencia de sueño noche tras noche no será la misma.

Materiales naturales VS materials sintéticos

Como hemos apuntado al principio, el precio de un colchón depende mucho de los materiales con los que está hecho, y ojo, porque hay quien pone como reclamo que el colchón es de un material y sólo tiene una capa de ese material (e incluso una capa fina) que ni siquiera es el núcleo. Si el núcleo es de látex, un colchón será normalmente más caro que otro que no lo sea, especialmente si es látex natural, que es uno de los materiales más costosos en un colchón. Si, además, un colchón cuenta con otros materiales naturales como el algodón, la lana, el lino, etc., será más caro que otro que sea de materiales sintéticos. Si, yendo más allá aún, optamos por materiales ecológicos, todavía tendremos que aumentar más el presupuesto.

Los materiales naturales (ecológicos o no) tienen como principal ventaja que suelen ser más sostenibles, hipoalergénicos, agradables al tacto, etc., así que si valoramos estos beneficios, tendremos que invertir más en el colchón. Además, suelen ser más duraderos, por lo que, como concluíamos en el apartado anterior, el precio por noche en un colchón de este tipo puede no ser muy superior al de otro con materiales sintéticos.

Por otro lado, debemos tener en cuenta que los materiales sintéticos no necesariamente van a ser de mala calidad. Un material sintético con buenas técnicas de fabricación puede dar lugar a un producto de excelente calidad, con prestaciones que a veces los materiales naturales no siempre dan (por ejemplo, el efecto abrazo de la viscoelástica -que la biovisco puede imitar-).

¿Qué puedo esperar por cada rango de precios?

Partiendo de la necesidad de un colchón doble (de unos 160 cm) para personas de peso y altura estándar (que no necesiten medidas especiales ni grueso especial para amortizar mejor el peso), podemos esperar:

Hasta 500 euros

Por este precio podremos encontrar colchones de materiales sintéticos (látex sintético mezclado con otros materiales, espuma de poliuretano) con técnicas de fabricación estándar, acolchados simples y una densidad del núcleo generalmente baja, es decir, que tendrán una menor vida útil, seguramente entre 5 y 7 años.

Pueden ser suficiente gastar esta cantidad en camas que usamos poco (segundas residencias, habitaciones de invitados…), si dormimos en un colchón de matrimonio de uso individual (siempre se deteriorará menos), si vivimos de alquiler o cambiamos con cierta frecuencia de domicilio porque aunque los colchones se pueden trasladar, siempre es más delicado transportar colchones de mayor calidad que suelen pesar más y su deterioro nos sale más caro.

Entre 500 y 1.000 euros

En este rango de precios podemos optar por colchones de materiales generalmente sintéticos incluyendo el látex, la viscoelástica, los muelles (incluyendo nanomuelles) o la espuma de poliuretano, con una firmeza suficiente para una buena alineación corporal y un confort a medida de los gustos de cada persona. Es posible que podamos encontrar zonas de descanso diferenciadas y garantías de producto amplias y progresivas. A partir de los 900 euros probablemente encontremos ya materiales naturales de alta calidad, aunque el látex natural generalmente hace subir el precio muy por encima.

Entre 1.000 y 1.500 euros

Con este presupuesto podremos encontrar muy buenos productos de descanso con materiales naturales (látex natural, biovisco, acolchados de algodón y de lana natural), dos caras (una para verano y una para invierno), incluso hechos artesanalmente, etc., con altas densidades y una mayor altura del colchón que son necesarios para una durabilidad mayor. Algunos ejemplos de MATINER Natural-Descans son el modelo Heveá de látex natural, o el Olimpia Turmaline Black HR de espumación de alta gama. En este rango de precios probablemente encontraremos garantías mejoradas.

Deberemos plantearnos invertir esta cantidad si queremos colchones que nos duren años, ya hemos pasado por alguna experiencia de sueño deficiente anterior y queremos mejorarla, dormimos acompañados y/o somos personas corpulentas (que deterioraremos antes el colchón con nuestro peso), queremos que nuestro colchón transpire mejor en verano y retenga el calor en invierno con tecnologías innovadoras y materiales de calidad, si tenemos alergias o preferimos materias primas naturales, si tenemos dolencias de cuello o de espalda y necesitamos una firmeza y una adaptabilidad determinadas, etc

Más de 1.500 euros

Invirtiendo estos importes lograremos modelos con núcleos de un mayor grosor, y por lo tanto una mayor firmeza, y más capas intermedias de confort para un sueño incomparable, materiales de última generación como geles y grafeno e incluso ecológicos para lograr prestaciones de descanso propias de hoteles de cuatro y cinco estrellas. Si hemos dormido en un buen hotel y nos ha sorprendido la comodidad de su colchón, probablemente está en este rango de precios o superior.

¿Más caro es mayor calidad?

Lo que podemos afirmar es lo contrario: generalmente más calidad es más cara. Los colchones de calidad implican tecnologías de fabricación más complejas, mejores materiales, más inversión en investigación y desarrollo, etc., y eso tiene un coste. Sin embargo, antes de comprar un colchón caro con la seguridad de que será de mayor calidad es importante asegurarnos:

• Preguntar al vendedor: no debemos tener miedo ni vergüenza de hacer todas las preguntas que consideremos sobre lo que diferencia el colchón que nos gusta de otros que hayamos visto.
• Probar el colchón: lo hemos explicado muchas veces en este blog, está comprobado que alguien que se ha tomado más de 15 minutos probando el colchón en la tienda está en un mayor porcentaje satisfecho con su compra.
• Comparar entre diferentes puntos de venta: si vemos un colchón que nos gusta en una tienda, no lo compremos a la primera, sino que anotemos el modelo y luego investiguemos si está en la misma línea que otros vendedores. Ojo, si lo encontramos mucho más barato en otro lugar, también debemos asegurarnos de que sea original o de que no sea defectuoso (algo que si nos interesa por su precio menor, debemos saberlo de antemano).
• Investigar la reputación de la marca: una marca con una buena reputación dejará rastro en internet (y por desgracia también una que tenga mala fama), de forma que si vemos que el fabricante cuenta con buenas reseñas, probablemente merezca un presupuesto superior.

Además, al principio hemos establecido algunos condicionantes del precio de un colchón. Si vemos que un colchón es muy caro pero no nos parece que tenga una garantía suficiente, o unas prestaciones excelentes, o materiales naturales, etc., quizá es mejor optar por otro producto o por otro vendedor.

Otros factores a considerar en el precio

No debemos olvidar que no sólo debemos tener en cuenta cuánto vale un colchón sino todo lo que lleva asociado. Si cambiamos a un colchón de más calidad probablemente será más alto, y eso significará comprar ropa de cama específica, quizá un cambio de somier, etc. Esto, sin contar con que si cambiamos también de tamaño de colchón, deberemos cambiar todo esto, valorar el espacio disponible en la habitación, etc.

MATINER Natural-Descans, fabricante de colchones de todas las gamas

En MATINER Natural-Descans surtimos tiendas de descanso con colchones de diferentes gamas con la mejor relación calidad precio, desde colchones de espumación de , hasta productos para hoteles de alta gama con numerosas zonas de descanso, acolchados de lujo y una firmeza excelente para una alineación correcta de nuestro cuerpo para lograr un sueño incomparable, con una durabilidad de más de 10 años.

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